
Jennifer Balboa
Loki y yo hace algunos años.
Sobre mí y mis inicios.
Mi trayectoria en el entrenamiento canino inició como una dueña primeriza de un cachorro llamado Loki que vino a poner mi mundo de cabeza. Antes de él no me hubiera imaginado terminar trabajando con perros (les tenía una fobia terrible), sin embargo cuando me dí cuenta la enorme responsabilidad que significaba tener un cachorro que pronto se convertiría en un perro de al menos 35 kg me di a la tarea de leer e investigar la mejor manera de criarlo.
Mi primera foto con Loki, mi primer perro, el día que llegó a mi vida como regalo de cumpleaños.
Los primeros desafíos.
Pronto llegaron los primeros desafíos, como todo cachorro Loki comenzó a explorar el mundo a su alrededor, el problema es que parte de explorar para él significaba morder, destrozar, y llevarse a la boca cualquier cosa que le causara curiosidad, y ni hablemos de su convivencia con niños y otros perros, se emocionaba demasiado al jugar y terminaba dejándo mordidas y rasguños por todos lados.
Como seguramente a muchos les ha pasado, mi primer acercamiento al mundo del entrenamiento canino fue al ver un programa de televisión muy popular en ese entonces, así que compré los libros de este entrenador y comencé a aplicar todo lo que aprendía ahí.
Siempre he sido muy aplicada cuando comienzo a aprender algo nuevo, por lo tanto seguí los consejos de estos libros al pie de la letra, sin embargo en vez de ver mejoría en el comportamiento de Loki me dí cuenta que cada vez jugaba aún más brusco e incluso llegaba a "enojarse" conmigo durante nuestras interacciones, pero lo que verdaderamente me hizo dudar de los métodos que estaba aplicando con él fue el sentimiento de que algo no estaba bien, no estaba disfrutando tener un perro, estaba en constante competencia con él porque creía que debía hacerle entender que yo era la "líder de la manada" o "alfa".
Loki hoy en día.
Un cambio de perspectiva.
Al investigar más a fondo en internet me dí cuenta que no había mucha información en español sobre otros métodos de entrenamiento, pero recordé que en uno de sus libros, el entrenador que yo seguía, mencionaba que uno de sus más grandes críticos siempre había sido el Doctor Ian Dunbar, ya que consideraba sus métodos agresivos y en contra de toda evidencia científica.
Esto llamó mi atención ya que yo no sabía absolutamente nada del entrenamiento basado en un enfoque científico y con evidencia, más bien parecía que el entrenamiento estaba envuelto en un montón de misticismo que solo algunos con el "don" podían dominar, sin embargo decidí darle una oportunidad y compré seis libros diferentes sobre este tema. Estos libros son hasta la fecha parte de la lista de libros que recomiendo para guardianes de mascota primerizos y quienes desean iniciar en el mundo del entrenamiento canino.
Encontrando el camino.
Después de cambiar mis métodos y mi perspectiva sobre el mundo canino descubrí que no solo era posible mantener una convivencia armoniosa con mi perro, sino que cualquier persona podía seguir los mismos principios y mejorar su relación con su perro e influír de forma positiva en su comportamiento, incluso resolviendo conductas que percibimos como problemáticas.
Hoy en día Loki tiene 11 años, y quien lo conoce se enamora de él. Además me ha ayudado a entrenar a cientos de perros y ayudarles a ganar confianza o incluso a enseñarles a perritos reactivos a convivir con otros perros.
Yo por mi parte llevo 8 años entrenando perros y enseñando a sus dueños, ayudándoles a establecer un vínculo seguro y formas de comunicarse efectivas por medio de un entrenamiento basado en el mutuo respeto y métodos comprobados que cualquiera puede poner en práctica.
Trato de hacer llegar este mensaje y todo el aprendizaje que he adquirido a través de los años por medio de mis videos en redes sociales, mis cursos presenciales y en línea, y ahora también por medio de mi blog.
Mi otro perro, Niko.